Por precio, salud y sabor, elige marisco congelado

Desde tiempos inmemoriales siempre ha habido dos bandos muy diferenciados a la hora de defender o criticar el consumo de marisco congelado. Hay quienes aseguran que ningún marisco congelado se podrá equiparar jamás al marisco fresco y quienes opinan que las virtudes del marisco congelado sobre el fresco pesan mucho más a la hora de inclinar la balanza hacia su lado.

En Becogalia lo tenemos muy claro. Sin restar aprecio al marisco fresco, creemos que el marisco congelado es altamente recomendable por muchísimos motivos. Los principales: precio, salud y sabor. Es nuestra opinión, y aquí va nuestro alegato.

EL MEJOR PRODUCTO AL MEJOR PRECIO

El marisco congelado es más económico. Es algo evidente y conocido por todos. No necesita mayor explicación, salvo contar que ese abaratamiento en el precio deriva de que del marisco congelado se aprovecha todo y no se pierde nada; y de que su manipulación y transporte es menos costosa. Menos costes en el proceso implican menos precio en la comercialización.

CON GARANTÍAS PARA TU SALUD

La congelación del marisco, al igual que la del pescado, evita que los gérmenes y las enzimas que puedan estar presentes en el alimento lleguen a descomponerlo, ya que gran parte de las bacterias dejan de actuar a -15 grados. Con la congelación del marisco se consigue garantizar su calidad microbiológica sin que éste pierda sus cualidades organolépticas. O lo que viene a ser lo mismo: menos bacterias con los mismos nutrientes (proteínas, grasas, vitaminas y minerales).

SIN PÉRDIDAS DE SABOR

Los que lo han probado, lo saben. En el proceso de congelación del marisco se mantienen todas las propiedades, incluido su característico, intenso y delicioso sabor. El producto llega directo el mar a nuestro plato, listo para cocinar o degustar tal cual. Además, son fáciles de almacenar, y muchos (la mayoría) vienen preparados para consumir directamente o cocinar sin tener que lavarlos, limpiarlos o procesarlos previamente.

El marisco congelado es más barato, saludable, más sencillo de conservar y con sus sus cualidades organolépticas inalteradas. Si con todo esto aún no os hemos convencido de lo buena idea que es consumirlo, ahí van otras cuantas cualidades más:

ES TENDENCIA

La sociedad cada vez lo demanda más. En los últimos años, según datos de la AECOC (la Asociación de fabricantes y consumidores), el consumo de productos congelados, más concretamente pescados y mariscos, ha registrado un incremento paulatino. La tendencia está clara y la sociedad reconoce, cada vez más, los beneficios del marisco congelado.

CUIDA EL MEDIO AMBIENTE

El impacto ambiental derivado de este tipo de productos es mucho menor que el del marisco fresco por motivos de transporte. Al estar congelado, su tiempo de conservación es mucho mayor, por lo que no es necesario realizar un transporte continuo del producto. Menos transporte, menos impacto en el medio ambiente.

LO PUEDES CONSUMIR CUANDO Y COMO QUIERAS

Con la congelación del marisco se elimina la dichosa estacionalidad, ese corsé que nos impide degustar un buen producto más allá de sus fechas de captura y fuera de temporada. Al estar congelado, podemos consumir marisco a largo de todo el año, cuando y como queramos. Y qué hay mejor que poder comer lo que o más te gusta justo cuando deseas…

Y hasta aquí nuestro alegato a favor del marisco congelado, de unos productos deliciosos y sanos que, ademáis, podréis encontrar muy fácilmente en el mercado. Sin ir más lejos, en Becogalia tenemos un amplio surtido que, seguro, cumplirá todas vuestras expectativas.

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